Friday, June 19, 2015

ALUD MARZO 2015

MUCHOS PREGUNTAN , POR QUE OCURRIO, LA NATURALEZA ES SABIA, AHORA SOLO DEBEMOS ENFRENTARNOS A SUBSANAR LAS HERIDAS QUE DEJO Y LEVANTARNOS ANTE LA CATASTROFE.

Thursday, April 09, 2015

Copiapó y sus relaves

Introducción La reciente catástrofe que atraviesa nuestra región ha traído, además de tristeza y desesperanza, una real preocupación acerca de que contendría el barro, pues podría hospedar elementos provenientes de los depósitos de relaves que rodean a la ciudad de Copiapó, Paipote y Tierra Amarilla. Repetidas veces han aparecidos artículos y comentarios en portales de noticias y redes sociales que las fuertes lluvias habrían arrastrado importantes cantidades de material toxico provenientes de dichos relaves, que se habían roto, que se colmataron y rebalsaron, que pseudoestudios indicarían que la ciudad está contaminada e inhabitable, etc, etc, etc. Lo cierto es que hasta la fecha de redacción de este articulo (8 de Abril) las únicas iniciativas son la de una ONG llamada relaves.org (quienes en una entrevista televisiva afirmaron no haber conocido antes la situación de la ciudad) y la del Ministerio de Salud que en conjunto con la Universidad Técnica Federico Santa María, sin embargo no hay mucha más información, como por ejemplo el área que comprende(rá) el estudio y el número y tipo de muestras, como para tener una idea de si será estadísticamente representativo. Según el Catastro Nacional de Depósitos de Relave (Sernageomin, 2015), la Región de Atacama cuenta con 55 activos, 18 no activos y 91 sin información (s/i). De estos, 84 se presentan en la comuna de Copiapó (33 activos, 12 no activos y 39 s/i), mientras que la comuna de Tierra Amarilla comprende 27 (7 activos, 3 no activos y 17 s/i). De ellas se destacan por sus dimensiones las de Atacama Kozán (2km al SE del cerro Capis), planta Matta (fundición Hernán Videla Lira) y Candelaria (5km al SW de Tierra Amarilla), siendo este el más grande. Estos últimos se encuentran activos pero relativamente alejados (>1km) de cauces de quebradas importantes. Sin embargo, hay un gran número de otros depósitos de relaves de mucha menor expresión superficial pero que revisten un real riesgo para la población dada su composición y su ubicación muy próxima a zonas habitadas o áreas de inundación cercanas al lecho del rio Copiapó. El Decreto Supremo Nº86, vigente desde 1970, establece las bases para la construcción y operación de tranques de relave (Sernageomin, 1989) obligando a que sean embancados en represas artificiales, sin embargo, no consideraba ninguna medida respecto del destino del material luego del cierre de una mina. El 2002, el Ministerio de Minería modifica el antiguo reglamento a través del Decreto Supremo Nº132 (vigente desde el 2004), detallando expresamente que los depósitos de relaves no pueden ser abandonados sin el cubrimiento de sus cubetas y taludes; no especifica un método en especial, pero se sugieren geomembranas o cubiertas vegetales (Lobos, 2008). Relaves Los depósitos de relaves corresponden a un lugar en el cual se acumulan los desechos derivados del procesamiento de minerales preciosos (cobre, oro, plata entre otros). Este comienza con la extracción de rocas desde una mina, las cuales son pulverizados (chancados) hasta tamaños inferiores al milímetro con el objetivo de liberar la mayor cantidad de mineral separándolo del estéril. Luego, se le agrega agua formándose una especie de pulpa, la cual pasa hacia el siguiente proceso (flotación) en la que las partículas individuales que contienen el mineral de interés son separadas por medio de la insuflación de burbujas de aire a las cuales se adhieren y se concentran en una especie de espuma por sobre la superficie de la pulpa (~5% del total). Las espumas que contienen estas partículas de valor son retiradas de la superficie, procesas y secadas para convertirse en concentrado. El resto de la pulpa, el desecho, constituirá el relave que se depositan en tranques o embalses. Un relave contiene una infinidad de elementos, predominantemente naturales donde mineralógicamente abunda el cuarzo, carbonatos, sulfuros, sulfatos, óxidos y silicatos, mientras que químicamente pueden contener cobre, arsénico, plomo, zinc, mercurio, hierro así como metales pesados (tierras raras) como el cadmio, entre varios otros. Uno de los factores que determina la composición mineralógica/química es la roca donde se hospeda el mineral originalmente (en el caso de la provincia los más comunes son granitoides, andesitas y calizas) y de los procesos por los cuales se trató el mineral para obtenerlo (flotación, cianuración, etc.) por lo que su constituyentes varían enormemente, siendo algunos más agresivos para el ser humano que otros. Que tan tóxicos son los relaves del valle El estudio realizado por Villarroel et al. (2009) en los depósitos de Hochschild Norte, Palomar 1, Palomar 2, San Esteban y Hochschild UDA (Fig. 1) y techumbres a lo largo de la ciudad, no arrojaron presencia de aquellos elementos más perniciosos para el ser humano como el cadmio y arsénico, al menos en puntos cercanos a la ciudad, aunque logran identificar la presencia de plomo en las cercanías de El Pretil, probablemente asociada a minería artesanal de oro reciente. Durante el siglo XIX existían 14 plantas de amalgamación distribuidas a lo largo del valle, 8 ubicadas en Copiapó, así también escoriales (como el de Nantoco) provenientes de fundiciones de cobre. Estos últimos dada su estabilidad y solidez, además de las condiciones ambientales no revisten un mayor riesgo (a pesar que contienen elevadas concentraciones de cobre, arsénico y otros metales pesados) (Eberle et al., 1997). Los depósitos de las zonas de Pabellón, Totoralillo y Potrero Seco contienen cantidades importantes de mercurio (Eberte et al., 1998) derivadas de la cianuración y amalgamación. Preocupación El evento climático del pasado 25 y 26 de Marzo es probablemente el más grande que se tenga registro en nuestra región, dada la cantidad de agua caída, extensión areal y los estragos asociados. Estos últimos están relacionados a flujos de barro y aluviones que afectaron a todas las ciudades y pueblos de la parte alta y central de los valles del rio Copiapó y rio Salado. En Copiapó, estos flujos de muy alto caudal lograron llenar el lecho seco del rio y colmatarlo, afectando varias avenidas paralelas a él, lo que tuvo un peak desde Paipote hacia la parte baja del valle. La gran cantidad de agua caída y el enorme caudal que por varias horas mantuvo el rio logro transportar miles de toneladas de sedimento acumulado por décadas en las quebradas y probablemente aquellos sedimentos superficiales que constituyen los depósitos de relaves que se encuentran en ambos márgenes del valle del Copiapo, especialmente a lo largo de esta y Tierra Amarilla. La comparación de imágenes satelitales del día 25 de Marzo versus de fechas anteriores (www.geoportal.cl/visor), permiten notar la ausencia de daños o escurrimientos de importancia en los diferentes depósitos de relave de la zona, exceptuando aquel ubicado 1km al NE de la planta Coemin (quebrada Cerrillos o Carrizalillo) en donde es patente la destrucción del pretil de seguridad ubicado en el extremo SW del tranque, abarcando 4.600m2, aproximadamente (Fig. 2). La nubosidad no permite ver de forma correcta, pero a priori se estima que el depósito de relave ubicado detrás del mall (Sali Hochschild) tiene grandes probabilidades de haber sido parcialmente afectado por escorrentías que descendían desde las quebradas ubicadas detrás, esto se hace patente al observar en terreno grietas que reflejan la erosión provocada por el agua descendente. También en el pueblo San Fernando se puede observar evidencia de escorrentía en las paredes de la roca que hospeda el tranque Bellavista y la planta Santa Laura. ¿Algo nuevo bajo el sol? Basado en lo expuesto anteriormente se podría pensar que la situación de la ciudad gatillada por los flujos de barro del 25 de Marzo es crítica, de una zona sobresaturada en metales pesados. Sin embargo, los depósitos de relaves en la zona asociados a pequeña minería (como los de Hochschild, los ubicados en Viñita Azul o en El Palomar) han convivido con la población por más de 50 años. Siendo afectados por eventos climáticos anómalos como el de 1997 y el del presente año, pero constantemente afectadas por erosión eólica que arrastra material hacia sus alrededores. Conclusiones y recomendaciones Sin lugar a dudas el evento climático recién pasado arrastró cantidades no determinadas aun de material derivado desde relaves, mayormente de aquellos provenientes de pequeña minería e inactivos hoy en día como los de Hochschild o los ubicados en Viñita Azul los cuales fueron arrastrados y probablemente ampliamente esparcidos por las calles de la ciudad. Pese a esto y a toda la alarma que el tema genera en las redes sociales, es una nueva versión de una antigua canción; los relaves (supuestamente) más perniciosos para la salud han estado allí por cerca de 50 años (y lo siguen estando a pesar de eventos climatológicos importantes) y es muy probable que todo el material arrastrado por el viento hacia la ciudad sea muy superior al arrastrado por los flujos de barro del pasado 25 de Marzo siendo respirado y consumido por todos los que habitamos Copiapó a lo largo de los años. La gran cantidad de agua cantidad de agua caída debió haber ayudado a diluir la concentración de elementos. Es justamente el factor erosivo que el viento produce a diario, 24 horas al día, 365 días al año, el que debe preocupar a las población ya que las partes superficiales de los relaves concentran las fracciones de material más fino y por ende mucho más fáciles de transportar por el viento y depositándose en grandes superficies. Es común al observar imágenes aéreas que los entornos de los relaves presentan un halo grisáceo producto de lo descrito anteriormente, esto es sumamente grave en zonas urbanas como El Palomar y Hochschild. Ahora bien, las investigaciones realizadas hasta la fecha dejan mucho que desear, principalmente por el tiempo que tomaron en reaccionar las entidades de salud pública, quienes son los que deben velar por la salud de la población. Así también otras iniciativas, con buenas intenciones (espero) de ayudar a determinar el impacto, aparentemente carecen de fundamentos técnicos. De igual manera, SERNAGEOMIN afirmó la ausencia de daños importantes en las estructuras de los tranques más grandes y de fácil acceso, sin embargo no mencionan nada de aquellos más peligrosos, por lo que sus observaciones son parciales. Finalmente, para saber fehacientemente cual es el nivel de contaminación, se necesita conformar un equipo multidisciplinario de expertos en la materia (metalurgistas, geólogos, ing. en minas y medioambientales, doctores, entre otros), independientes, quienes planifiquen un extenso muestreo sistemático (de superficie y sub-superficie) a lo largo y ancho del valle (dentro y fuera de las zonas inundadas) junto con observaciones de terreno para que sea estadísticamente representativo, de esta manera poder tener la certeza si es solo el flujo de barro en contacto con residuos de relave lo que nos debiese preocupar y/o el efecto eólico con el cual convivimos a diario es más dañino. Es muy posible que sea esto último hacia donde deben apuntar las preocupaciones de la autoridad. Referencias Eberle, W.1998. LA influencia ambiental de la minería pasiva y active en el área de Copiapó, III Región, Chile, incluyendo aspectos geológicos ambientales. Informe registrado proyecto Fortalecimiento del departamento de ingeniería y gestión ambiental de SERNAGEOMN, 48p. Lobos, M.2008. Efectividad de biosólidos para la fitoestabilización de un traque de relaves mineros en la comuna de Nogales. Tesis para optar al título de Ingeniero Forestal, Universidad de Chile, 86p. SERNAGEOMIN. 2015. Catastro nacional de depósitos de relave: Depósitos activos y no activos 2015. 59p. Villarroel, L; Morales, J; Miranda, P; Diaz, C., Arce, N; Campos, C. 2009. Captura, cuantificación y caracterización del material particulado sedimentable en techumbres de la ciudad de Copiapó. IDESIA N°27, pp. 47 – 57.
Miguel Cáceres M. Geólogo 09 abril 2015

Saturday, October 19, 2013

Venta de poleras $ 6000 cada una

Venta de poleras $ 6000 pesos chilenos. Locomotora, peso constituyente, lagartija , petroglifos Atacama, etc... Tallas S, L, M, XL

Wednesday, September 04, 2013

Año 2013.

Desde que habito la ciudad desde ela año 1990, han ocurrido grandes cambios en esta, la doble via en Copayapu, el crecimiento repentino de la ciudad sobrepasando el sector del pueblo San Fernando, y El Palomar, ex trapiche. Hoy año 2013, es increible observar la cantidad de vehiculos y personas que transitan por la ciudad. En la actualidad con la implementación de la doble vía por calle Los Carrera, se estrecho el trayecto que avanza desde Paipote hacia el centro, los tacos de vehículos comienzan sobrepasando lo normal que ocurria en la ciudad, hace pocos años. Hubo un corte de PIMIENTO centenarios, en avenida Copayapu, nos desertificamos diariamente. Es una tristeza que nadie se haga responsable, y el acto ya se realizó, hubo un corte masivo de especies pimientos, para la construcción de puentes para un centro comercial.

Wednesday, February 20, 2013

BIENVENIDO 2013

Nuevo año, con muchas expectativas, por fin se visualiza lentamente la primera edición de AtacamaOculto, novedades en el área de impresiones gráficas y estructuras metálicas.

Monday, July 02, 2012

Copiapó, el valle se queda sin agua...

Invierno desértico. "Sin Agua" Es una tristeza pensar diariamente que la escasez hídrica, se mantiene latente día a día, un lecho del primer río donde se estableció un descubrimiento de los españoles, asentamiento indígena que durante muchos años se alimento gracias a este recurso. Periódicamente se habla de la llegada de nuevos proyectos mineros, y hay alguno que le interesa esto, la escasez hídrica. Puede ser un tema sumamente repetitivo , nos estamos secando .